En la era digital, la autenticidad y la conexión emocional son fundamentales para el éxito de las marcas. LLYC, firma global en marketing y asuntos corporativos, ha lanzado una metodología innovadora que permite a las marcas crear identidades conversacionales sólidas y adaptables en un mundo impulsado por la inteligencia artificial (IA). Con este enfoque, buscan ayudar a las empresas a proyectar una voz coherente, empática y auténtica en todos sus canales digitales.
El desafío de las marcas y la identidad conversacional en la era de la IA
El auge de las plataformas digitales ha transformado la manera en que las marcas interactúan con sus audiencias. Con la IA al frente de estas interacciones, es crucial que las marcas no solo sean reconocibles, sino que también transmitan mensajes consistentes y adaptados a distintos canales y contextos. Según LLYC, las marcas deben humanizarse más que nunca para generar una conexión emocional duradera con los consumidores.

En palabras de Andrea Cortés, Directora de Influencia Digital en LLYC México: “Esta metodología ayuda a las marcas a adoptar una voz que no solo comunica, sino que también genera empatía y confianza, creando un vínculo más auténtico con los consumidores”.
El enfoque innovador de LLYC
La propuesta de LLYC se basa en la personificación de las marcas, dotándolas de características humanas y una voz única. Este enfoque asegura que la marca mantenga una identidad coherente en todos sus puntos de contacto, ya sea a través de chatbots, redes sociales o plataformas de streaming.
Para lograr esto, LLYC desarrolla un proceso de inmersión que incluye auditorías detalladas de los activos de la marca, estudios de mercado, entrevistas y talleres con equipos internos y externos. La finalidad es capturar la verdadera esencia de la marca y convertirla en una Identidad Conversacional que sea efectiva y adaptable en múltiples plataformas.

La competencia de LLYC – Ogilvy y su enfoque en branding conversacional
Una agencia que también ha destacado en el desarrollo de identidades conversacionales es Ogilvy. La agencia implementó una estrategia similar para American Express, creando un sistema de voz y tono personalizado que permite a la marca ofrecer una experiencia coherente y emocionalmente conectada en sus plataformas digitales. Al igual que LLYC, Ogilvy se centró en la personalización de la interacción para generar confianza y empatía en cada punto de contacto con el consumidor, lo que reforzó su imagen de marca global.
En el mundo digital actual, donde la inteligencia artificial está presente en casi todas las interacciones, las marcas que no logren crear una identidad conversacional coherente y auténtica corren el riesgo de perder relevancia. La metodología de LLYC se presenta como una solución innovadora para enfrentar este desafío, ayudando a las marcas a desarrollar una voz más humana que conecte emocionalmente con sus audiencias. Con ejemplos como el de Ogilvy y American Express, es claro que el futuro del branding conversacional está en la creación de experiencias auténticas y coherentes en todos los canales digitales.