En un mundo empresarial en constante evolución, la retención del talento y la creación de oportunidades equitativas se han convertido en objetivos prioritarios para las empresas. Según el último informe de sostenibilidad y prácticas ESG de Bain & Company, el 70 por ciento de los empleados considerarían cambiar hacia empresas que invierten formación y desarrollo profesional de su equipo.
Esto destaca la creciente valoración que los trabajadores otorgan a las oportunidades de aprendizaje y desarrollo en sus lugares de trabajo.

Empresas que invierten en formación: una prioridad estratégica
Carlos Martínez, office Head de Bain & Company, enfatiza que invertir en el desarrollo de los colaboradores es esencial para el crecimiento empresarial. Esta inversión no solo proporciona a la fuerza laboral una variedad de habilidades, sino que también impulsa la innovación y la diversidad dentro de la empresa, sentando las bases para un futuro empresarial inclusivo y resiliente.
Ejemplos de empresas que priorizan el desarrollo de sus empleados
Un ejemplo destacado es Enel, que ha implementado programas de reciclaje y recolocación para los trabajadores de sus centrales eléctricas de carbón. Estos programas han permitido que el 45 por ciento de los empleados que dejaron estas centrales fueran recolocados en nuevas oportunidades laborales, adaptadas a sus perfiles profesionales y las necesidades de la empresa.
Además, empresas como United Airlines están adoptando enfoques innovadores para abordar las necesidades de talento críticas y promover la diversidad, la equidad y la inclusión. El programa «United Aviate Academy», lanzado en 2022, tiene como objetivo formar a 5,000 nuevos pilotos para 2030, destacando su compromiso con la diversidad al reclutar principalmente mujeres y personas de grupos raciales y étnicos minoritarios.

La inversión en aprendizaje y desarrollo como pilar fundamental
En un entorno laboral en constante transformación, la inversión en el aprendizaje y el desarrollo de los empleados emerge como un pilar fundamental para las empresas. Aquellas que priorizan el crecimiento y la formación de su equipo no solo atraen y retienen talento, sino que también están mejor preparadas para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades del futuro empresarial. La inversión en el desarrollo de los colaboradores se presenta como una estrategia clave para construir empresas inclusivas y adaptadas al cambiante panorama laboral.