El inminente cierre de Salesforce Social Studio en noviembre de 2024 presenta un desafío significativo para las marcas que dependen de esta plataforma para gestionar sus actividades en redes sociales. Este software ha sido clave para la escucha social, la publicación de contenidos y el análisis del comportamiento de las marcas en el entorno digital. Sin embargo, con la desaparición de esta herramienta, las empresas no solo pierden estas funcionalidades, sino también la posibilidad de acceder a los datos históricos asociados. Ante esta realidad, es crucial que las marcas planifiquen una transición estratégica para evitar interrupciones en sus operaciones y mantener su eficacia en la gestión de redes sociales.
Evaluación del impacto y auditoría de operaciones
El primer paso en este proceso es comprender el impacto que tendrá el cese de Social Studio en las operaciones diarias. Las marcas deben realizar una auditoría exhaustiva para analizar cómo utilizan actualmente esta herramienta y qué funciones son críticas para sus actividades. Identificar estas funciones es esencial para poder buscar alternativas que cubran estas necesidades. Según Emplifi, líder en plataformas de customer engagement, las marcas deben enfocarse en evaluar los patrones de uso y la eficiencia que Social Studio aporta a sus operaciones diarias.
Documentación y migración de datos
Una de las preocupaciones más importantes es la migración de datos. Emplifi recomienda que las marcas realicen una auditoría detallada de los datos almacenados en Social Studio y planifiquen su exportación y uso futuro en la nueva plataforma que elijan. Documentar personalizaciones y automatizaciones es clave para que la transición sea lo más fluida posible. Este proceso puede incluir la transferencia de configuraciones personalizadas, como informes específicos y respuestas automáticas que se hayan implementado en Social Studio.
Selección de una nueva herramienta de gestión de redes sociales
Con Social Studio saliendo del mercado, es fundamental que las marcas seleccionen una nueva herramienta de gestión de redes sociales que satisfaga sus necesidades operativas. Aunque no existe una solución perfecta que cubra todas las funcionalidades de Social Studio, las marcas pueden acercarse a esa ideal al comparar diferentes opciones en función de varios criterios:
- Paridad de características: Es vital que la nueva herramienta cubra el mayor número posible de funcionalidades que las marcas utilizaban en Social Studio. Además, las plataformas más actuales ofrecen el uso de inteligencia artificial (IA) y automatización, lo que puede llevar el customer engagement y la atención al cliente al siguiente nivel.
- Facilidad de uso: La nueva herramienta debe ser intuitiva y fácil de adoptar para los equipos, minimizando el tiempo de adaptación y entrenamiento.
- Rentabilidad: Es importante que las marcas consideren los modelos de precios de las nuevas herramientas y cómo se ajustan al presupuesto asignado.
- Soporte y comunidad: Una comunidad de usuarios activa y un servicio de atención al cliente receptivo son factores que pueden facilitar la transición y resolver problemas rápidamente.
Ejemplo Real: La Estrategia de Sprinklr
Un ejemplo de una empresa que ha facilitado la transición desde Salesforce Social Studio es Sprinklr, una plataforma de gestión de redes sociales que ofrece una amplia gama de funcionalidades comparables, y en algunos casos superiores, a las de Social Studio. Sprinklr no solo cubre las funciones básicas de publicación y escucha social, sino que también integra capacidades avanzadas de IA para el análisis de sentimientos y la personalización del customer engagement. Marcas como McDonald’s han migrado a Sprinklr, aprovechando su capacidad para analizar en tiempo real la interacción de los clientes en diferentes plataformas, lo que ha mejorado significativamente su estrategia de marketing digital.
La transición desde Salesforce Social Studio puede parecer un desafío abrumador, pero con una planificación adecuada y la elección de la herramienta correcta, las marcas pueden no solo mantener la continuidad de sus operaciones, sino también mejorar su eficacia en la gestión de redes sociales. La clave está en realizar una auditoría detallada, documentar las personalizaciones existentes y seleccionar una nueva herramienta que ofrezca una paridad de características, facilidad de uso y un sólido soporte al cliente. Ejemplos como el de Sprinklr demuestran que es posible realizar una transición exitosa y aprovechar esta oportunidad para mejorar las estrategias digitales y de customer engagement.